La gran relevancia que tiene actualmente en México la arqueología —en su doble acepción de quehacer científico y de suma de conocimientos acerca de nuestro pasado— se debe en buena medida a una larga y vigorosa tradición que hunde sus raíces en los siglos XVII y XVIII. Tanto el inicio como el prolongado recorrido de esta disciplina son ricos en lugares, personajes, relaciones y acontecimientos que, de una u otra manera, inciden en nuestro presente y en la particular manera en que se aborda hoy, a través de sus vestigios materiales, el estudio de las sociedades que nos precedieron. En esta conferencia, impartida por dos de los arqueólogos más importantes de nuestro tiempo, se remontará a ese periodo lejano, donde la arqueología daba sus primeros pasos, y se invitará a los asistentes a realizar un viaje a ciudades desiertas que servían de mudo escenario a exploradores deslumbrados por las civilizaciones extintas, a identificar círculos de anticuarios y coleccionistas que encontraban en sus tertulias un enorme placer al explicar los tiempos idos…